martes, 31 de marzo de 2009

Los Personajes de "Crónica de una Muerte Anunciada"

Gabriel García Márquez, un escritor talentoso. Reconocido mundialmente por "Cien Años de Soledad", otra obra importante que escribió es "Crónica de una Muerte Anunciada". Aunque no tanto como en la anterior, la historia de "Crónica de una Muerte Anunciada" tiene cantidad de personajes con nombres complicados y hasta cierto punto similares. He aqui un mapa conceptual con los más importantes.
Este mapa conceptual describe las relaciones familiares y románticas de los personajes en la historia "Crónica de una Muerte Anunciada". Los cuadros en blanco son las hermanas de Bayardo San Roman, cuyo nombre nunca se menciona en la historia. Los corazones representan relaciones afectivas románticas o familiares. Aunque aparece el padre o la madre de algunos personajes, el otro padre no es mencionado en la historia, en estos casos no incluí ese espacio (por estética y orden, evitando un exceso de cuadros vacíos).

lunes, 2 de marzo de 2009

EL CABALLERO INEXISTENTE, Una armadura tan vacia como su historia.

Si bien las historias de caballeros suelen ser interesantes, por tener romance, acción, aventuras y héroes y princesas que con mucho gusto uno se imagina, las travesías de una armadura parlante de nombre Aguilulfo Emo Bertrandino de los Guildivernos y de los Otros de Corbentraz y Sura son increíbles. Son de hecho demasiado increíbles, y te hacen dudar un poco de la salud mental de la monja, quien, se supone, escribe la historia.

Inspirada en cosas insignificantes, esta monja comienza a relatar la historia de este caballero inexistente, cuyo nombre completo no volveré a escribir porque me llevaría el resto de la tarde. Este caballero solo existe por su fuerza de voluntad, lo mantiene existiendo el deseo mismo de seguir existiendo. Este deseo ferviente no se mantiene solo por que Aguilulfo quiera seguir existiendo por el mero hecho de existir, sino que quiere existir para ser lo más existente posible. Por ello sigue las reglas de la caballería al pie de la letra. Esto mismo lleva a sus compañeros a tratarlo con cierto desdén, pues ellos no sienten deseos de seguir dichas reglas completamente, y al verlo actuar recuerdan que no están cumpliendo con su deber como caballeros de Carlomagno.

En fin, después de muchas enredadas aventuras, Aguilulfo deja de existir al darse cuenta de que se volvió caballero por razones deshonestas, lo que le quita la razón primordial de existencia a este caballero inexistente.

En contradicción con lo mencionado antes, debe reconocerse que la idea de un caballero que existe solo por su fortísima voluntad es bastante original, y los acontecimientos, aunque parezcan sacados de la mente de un niño que ha jugado demasiados videojuegos, tienen una buena estructura cronológica, pues esta no es llana y lineal, y revelan pasado y futuro en los momentos adecuados.

Entonces, ¿Qué hace esta lectura tan insípida para la mente del lector? Es simple responder esa pregunta con solo haber leído los primeros capítulos. El contenido de la lectura no provoca llanto, risa, miedo… Quizá quien terminó la lectura lo hizo con la optimista esperanza de que al avanzar esta se pusiera mejor, sin embargo es muy probable que haya quedado defraudado(a) ante ese desenlace que era tan predecible. Aguilulfo no buscaba nada en especial, tenía lo que quería desde el principio de la historia: existir para ser un caballero. Nada de lo que sucede en la historia tuvo ni pudo haber tenido efecto alguno en la condición de Aguilulfo para mejor ni para peor. Como no había forma de que mejoraran las cosas para él, puesto que sus deseos ya estaban satisfechos, las únicas opciones serían que perdiera su existencia o que se quedara todo igual que como empezó, en cuyo caso ni siquiera valdría la pena hojear ese libro para pensar en elegirlo.

Preferible es leer los libros de “El Señor de los Anillos”, “Harry Potter” y otros de ese tipo de lectura, ya que aunque muchas veces más quiméricos que el de “El Caballero Inexistente”, el hecho de que ocurren en tierras imaginarias o que hay más de un personaje fenomenal justifica la presencia de esos factores imposibles o sobrenaturales, como en las historias de súper héroes creadas por Marvel o DC Comics, o las fantásticas criaturas y personajes creados por Nintendo en sus múltiples videojuegos. El que lo único inexistente en el mundo real que aparece en esta historia es su protagonista lo hace algo extraño, no hay mas de su tipo, o parecidos, o de su mismo origen. Ni siquiera hay un antagonista con características similares. Además a nadie le afecta el hecho de que sea una armadura vacía que habla con quien sabe que garganta y se sostenga con quien sabe que osamenta. En todas las historias de las mencionadas, aquellos que no tienen nada fuera de lo normal ven a los que si lo tienen como extraños, y viceversa algunas veces.

En resumen, todo en esta historia es bastante extraño, es confusa de leer en algunas partes y algunas otras son tan raras que te ves casi forzado a cerrar ese libro y conseguir otro, o si acaso, conseguir algún otro pasatiempo…

sábado, 31 de enero de 2009

El Niño Con el Pijama de Rayas

“El Niño con el Pijama de Rayas”. Es un título idóneo para una historia como esta por más de una razón. La historia de un niño en un campo de concentración es siempre muy predecible, y aunque esta tiene un giro infantil, no cambia ese hecho. Nuestro título es, no obstante, un poco menos predecible que toda la historia, y la mera curiosidad causada por dicho título puede llevarnos a comenzar la lectura. Este título se vuelve así, la razón para afirmar que “he leído el libro”, pues la historia en sí no es tan placentera para leer.

Bruno es un niñito cuyo padre es un general nazi de alto rango, y que es transferido al campo de concentración de Auschwitz. Toda la familia se resignaba a dicho cambio. Bruno extrañaban a sus antiguos amigos y su casa, porque además de ser mucho más pequeña que la anterior, que tenía cinco pisos, el se aburría mucho al no poder jugar con nadie en esta nueva casa. El reprocha a su padre constantemente el haber aceptado ese cambio, y se muestra infeliz la mayor parte del tiempo. Más adelante en la historia, el conoce a quien será su único amigo en este campo de concentración y también su nueva fuente de diversión y conversación. Bruno visita a su nuevo mejor amigo todo el tiempo, se ven a través de la barda y se vuelven tan cercanos que, cuando por fin la familia de Bruno regresará a su casa, cruza la barda para ayudar a Shmuel a encontrar a su desaparecido padre. Poniéndose un “pijama de rayas”, Bruno acompaña a Shmuel en una marcha, de ninguno de los dos niños podrá regresar…

Como se había dicho, la historia es predecible. Una sola vez de haber leído cualquier cosa sobre el Holocausto te lleva a inferir de forma rápida el contenido de la lectura. No hace falta ser un lector empedernido podrá imaginar desde cierto punto antes de la mitad que ambos niños terminarán del mismo lado de la barda y que tendrán un fatal destino.

Más allá de ser predecible, la historia es muy aburrida por la cantidad de descripciones innecesarias que posee. El cuento tiene cantidad de episodios que uno puede dejar de leer sin perderse de mucho. Puedes leer dos capítulos, omitir dos, y seguir el hilo de la historia por completo. Quizás sea por la presencia de muchas repeticiones a lo largo y ancho de la historia, lo que vuelve la lectura algo atenuante y convierte una historia aburrida en una que difícilmente terminaría alguien que cuenta con una televisión en su hogar.

No obstante, existen también algunos puntos a favor de este cuento de John Boyne, aunque son menos que los que hay en su contra. La historia es creativa. Fuera del principal conflicto, tenemos algunos excelentes detalles, como el amorío entre la madre de Bruno y un miembro más del ejército nazi.

No conozco ninguna otra historia sobre el Holocausto que trate sobre los problemas de un niño alemán. La mayoría de las historias, como “La Vida es Bella” o “El Diario de Ana Frank”, solo hablan de familias judías y todo lo que sufren.

“El Diario de Ana Frank” trata sobre los cambios drásticos que el Holocausto trae a la vida una jovencita, como “El Niño del Pijama de Rayas” habla de los cambios que le trae este evento histórico al pequeño Bruno. La diferencia es que “El Diario de Ana Frank” aborda la historia de dos familias de judíos, y la de Bruno es la historia de una familia de alemanes. Cabe mencionar también que la de Ana Frank es una historia real, y eso le quita lo inverosímil que tienen los personajes de la historia de Bruno.

Para resumirlo todo, esta es una historia que debe leerse cuando realmente se tenga tiempo para ello. De otro modo nunca terminará la lectura, a menos que todas las demás obras se hayan
agotado en su biblioteca.